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4/1/23

habéis nacido para el placer 💬 #windtalkers

Dos hombres se reencuentran tras años de separación. Judah Ben-Hur y Messala no pueden contener su alegría: se agarran del brazo, se miran a los ojos y se miran con una media sonrisa. Se frotan las manos mientras comparten una bebida y se ríen nerviosamente. Su intercambio podría entenderse como una declaración de amor: “Después de tantos años, todavía cerca”. "En todos los sentidos." “Dije que volvería”. “Nunca pensé que lo harías. Estoy tan feliz." La escena culmina con Ben-Hur y Messala bebiendo vino de sus cálices con los brazos entrelazados, mirándose intensamente.
Según el escritor de Ben-Hur, considerada la mejor película sobre romanos jamás filmada, los dos hombres habían sido amantes.
Charlton Heston, quien interpretó a Judah Ben-Hur, reaccionó con furia cuando le hablaron sobre las connotaciones homoeróticas. Hoy, 60 años después del estreno de la película, sus interpretaciones son apasionadas y contradictorias.
El director, William Wyler, aceptó la idea, pero hubo un obstáculo: Charlton Heston.
Wyler temía que el protagonista de la película, una de las estrellas más conservadoras de la época, "se derrumbara" si descubría el punto de la trama. “Yo me ocuparé de él”, dijo Wyler. No le digas nada a Heston. Habían tenido problemas para encontrar un personaje principal: Burt Lancaster encontró el guión intolerablemente aburrido y Paul Newman no quería mostrar sus piernas. No podían arriesgarse a que Heston se pusiera nervioso y los dejara sin un protagonista.
La solución fue explicarle el pasado romántico a Stephen Boyd, quien interpretó a Messala, pero ocultárselo a Heston. Durante el rodaje, todos lo sabían menos él. Vidal recordó cómo Heston imitó la postura digna de Francis Bushman en la producción de Ben-Hur de 1925, mientras, recuerda, “Stephen Boyd está actuando a pedazos. Hay miradas que son tan claras”. Boyd y el resto de la tripulación encontraron divertido formar parte del secreto.
EL ALMA está conectada con la REALIDAD y nos muestra LA REALIDAD mejor que nada y nadie. Por ello es necesario crear las condiciones para silenciar la mente, para que la mente deje de mandarnos como dueña de nuestra existencia y pase a ser solo el instrumente que solo es...
https://vimeo.com/706036450
Conectar con nuestro interior, con lo profundo y practicar esto con frecuencia nos acercará a esa REALIDAD que continuamente nos llama desde dentro y que SE IRA MANIFESTANDO cada día más, en la medida que vayamos dándole valor, confiando en nuestra intuición y estemos preparados para recibirla.
💬 #windtalkers  @MeponeCNP 
Otra foto mía para el que se anime.
El Ministerio del Interior va a intentar, por segunda vez en las últimas dos legislaturas, que la policía tenga un régimen de personal del que ahora carece. Pero lo más probable es que se quede en un intento. La Dirección General de la Policía presentó este jueves a los sindicatos del cuerpo un borrador de anteproyecto de ley orgánica de Régimen de Personal de la Policía Nacional —el segundo que elabora en menos de un mes—, cuya principal novedad es el nombre: el Cuerpo Nacional de Policía pasaría a llamarse Policía Nacional, es decir, que regresaría a la denominación que tenía hasta 1986. El texto —cuajado de medallas (antiguas y nuevas, pero casi siempre concedidas en función del “patriotismo”), con nuevas categorías y con el regreso del cargo extinto de subcomisario— ha irritado a los sindicatos del cuerpo.
El segundo borrador fue presentado por Antonio Rodríguez, subdirector de Recursos Humanos de la Policía, a los sindicatos, que fueron convocados de urgencia el día anterior. La llamada obedecía a las severas críticas de las centrales al primer borrador, entregado el 4 de abril. En líneas generales, los sindicatos ven en el texto un intento loable de regulación que necesitan (el de la Guardia Civil está en trámite), pero un paso atrás por su contenido.
La ley, en caso de que el Gobierno acabe iniciando los trámites, está abocada a la melancolía: los plazos legislativos supondrían que se pusiera en cola de las que ya están en el Congreso y que decayera (que se dejara en un cajón al disolverse las Cortes). Por ello los sindicatos miran con un doble recelo el texto que ha puesto en marcha el director general de la Policía, Ignacio Cosidó. Las principales novedades del texto, ahora retocado, son estas:
» Vuelve la Policía Nacional. El texto (artículos 1 y 2) subraya el cambio de nombre, que retrotrae a la denominación previa a 1986. Ese año se unificaron el Cuerpo Superior de Policía (de investigación) y el de Policía Nacional (la antigua Policía Armada militar, centrada en el orden público). El instituto armado de naturaleza civil resultante fue denominado Cuerpo Nacional de Policía. El proyecto subraya: “Los funcionarios de carrera de la Policía Nacional recibirán la denominación genérica de Policías Nacionales”. Los sindicatos cuestionan por retrógrado el cambio de nombre y consideran que los costes de la modificación (uniformes, placas, documentos...) serían muy elevados e “innecesarios”.
🔜 » Cambios en la jubilación. Es lo que posiblemente más malestar ha causado en el cuerpo. Entre los 58 y los 64 años, según las escalas, solo podrán permanecer en activo quienes ocupen puestos de despacho, sin acción ni investigación, y siempre que haya puestos vacantes. También tendrán que pasar a puestos de dirección, coordinación, gestión o apoyo los agentes que “experimenten una disminución de sus condiciones psicofísicas cuya intensidad no comporte el pase automático a la jubilación o la segunda actividad”. Los sindicatos aseguran que este artículo 45 puede suponer “una desbandada de jubilaciones de policías cuando ya son realmente experimentados y veteranos para las investigaciones”.
🔜 » Un saco de medallas. Nada menos que 22 condecoraciones distintas frente a las cuatro actuales. El aumento contrasta con la anunciada intención de Cosidó de reducir su número. En la mayoría de ellas, el “patriotismo” será decisivo para obtenerlas. Seis (las cruces de oro, plata y bronce al mérito policial con distintivos rojo o amarillo) supondrán aumentos retributivos de carácter vitalicio y acumulativo de hasta el 20% (en las de oro). Hasta ahora las medallas se concedían por una ley de 1964. Diez de las 70 páginas del proyecto están dedicadas a detallar las medallas y sus porqués.
🔜» Subcomisario y “subinspector mayor”. Subcomisario era el nombre o grado que desde 1986 tenían los agentes de la primera categoría de la escala ejecutiva. Posteriormente, pasaron a denominarse inspectores jefe. Cosidó quiere retomar para estos el nombre de subcomisarios y, además, introducir en la escala de subinspección la figura del “subinspector mayor”, cargo que para el Sindicato Unificado de Policía supone “otro matiz militar” y un escollo a la promoción interna.

Un cerdo policía puede reconocer una presa por varias ocasiones para atacarla frecuentemente y así tener una fuente segura de alimento; de la misma forma en que conocen los lugares donde sus presas consiguen los alimentos, lo que les permite identificar hábitats que aseguren su dieta...(Haz click en las imágenes para ver los video-clips)...Hablaré un poco de la psicología del cerdo policía. Existe en ellos una compleja aberración de autoridad derivada de su vida sucial social, familiar y “profesional”: el cerdo cree tener autoridad en su hábitat, pero responde a la autoridad de otros cerdos o de las águilas negras, por lo que intentan desatar todo aquél poder reprimido en sus víctimas. Lo correcto en caso de un ataque es siempre contraatacar dicha autoridad con un humor sarcástico que es para ellos incomprensible, produciendo lo único que pueden almacenar sus cerebros: más frustraciones.Este hecho generalmente les produce un terror tremendo y optan por huir. Si no es usted un frecuente portador de alimento para cerdos ¡aprovéchelo! búrlese a sus anchas con sutileza, pasará un agradable momento que alimentará su ego y le permitirá descargar un poco de agresividad punitiva.
Y bien, hasta aquí la lección del día de hoy. Disculparán la sobriedad del texto pero en la etapa exploratoria no pude soportar el olor de éstos animales, casi los confundo con zorrillos. ¡Ah! ahora que recuerdo, los cerdos policías se aparean también con zorrillas -las hembras del zorrillo- son éstas las únicas que pueden soportar tal hedor.
Espero que hayan aprendido mucho de la naturaleza de éstos puercos, concluyo agradeciendo a tres personas sin las que éste texto no hubiese podido existir: primero, a Camilurmu y Daniosmo por el acompañamiento en el trabajo etnográfico, y segundo, a Blueandtanit por la asesoría en asuntos de taxonomía. Y hasta la próxima.

1 comentario:

Anónimo dijo...

joer que morbazo

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